El pasado martes 30 de mayo, la Comisión de Derechos de la Niñez y Adolescencia de la Cámara de Diputados tuvo su reunión ordinaria en la que discutió la Opinión de la Iniciativa de Reforma en Materia de Simplificación Orgánica, la cual busca desaparecer 18 organismos, incluyendo al SIPINNA y trasladar sus funciones al DIF, y que fue presentada por el Presidente con el objetivo de racionalizar la estructura orgánica de la Administración Pública Federal para supuestamente “hacer más eficientes los recursos públicos, agilizar los procesos administrativos y aprovechar los bienes nacionales adecuadamente”.
Quienes seguimos la transmisión en vivo de la reunión atestiguamos escépticamente cómo las 14 diputadas del grupo parlamentario oficialista votaron en contra de la Opinión técnica que la Comisión había puesto en la mesa de discusión. Pero, ¿qué contenía esta Opinión técnica que fue rechazada por la mayoría morenista?, y ¿por qué desde el Pacto por la Primera Infancia apoyábamos que la Opinión fuera aprobada sin cambios?
Pues bien, hay que decir que la citada Comisión de Derechos de la Niñez y Adolescencia presentó una Opinión en Sentido Negativo, como producto del análisis exhaustivo realizado en una sección del documento denominada “Consideraciones” (todas las opiniones técnicas la llevan y ahí se exponen todos los razonamientos y argumentos que dan sustento a la Opinión).
Para fortalecer este análisis, la Comisión de Derechos de la Niñez y Adolescencia organizó, el 24 de mayo de 2023, el Foro “El Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA) en el marco de la Reforma en Materia de Simplificación Orgánica”. Para quienes no lo hayan visto, les recomiendo que lo hagan en este enlace de YouTube. Este foro fue una cátedra sobre lo que significan los sistemas de protección de derechos de niñas, niños y adolescentes, sus alcances e importancia para los países en la región y, en particular, para México.
Personas expertas en derechos humanos y representantes de organizaciones de la sociedad civil se pronunciaron con argumentos sólidos y libres de politiquerías sobre la importancia de fortalecer al SIPINNA, y evitar el retroceso que representa la propuesta de traspasar sus funciones al DIF y que, además, tranquilamente le quita la responsabilidad a la Secretaría de Gobernación de su obligación con la niñez y adolescencia en México.
Recordemos que la existencia del SIPINNA (como Sistema Nacional) es una obligación del Estado mexicano al haber ratificado la Convención de los Derechos del Niño. El SIPINNA está enfocado en coordinar políticas públicas de infancia y adolescencia para garantizar sus derechos universales. No es lo mismo que el DIF, el DIF tiene su propio mandato, que consiste en la asistencia social y la protección especial (restitución de derechos violentados) de niñas, niños y adolescentes. Asimismo, el DIF no tiene los recursos ni las capacidades estructurales, operativas y técnicas para operar el SIPINNA.
Cabe destacar que esto no es un demérito del personal que ahí labora, pues existen muchas funcionarias y funcionarios comprometidos con su trabajo en el Sistema DIF Nacional, en los sistemas estatales y municipales, simplemente, me refiero a que son instituciones de naturaleza diferente. Entonces, ¿por qué la autoridad del Ejecutivo Federal y las personas legisladoras insisten en confundirse y en confundir a otros?
No se trata de llevarle la contraria al Presidente nada más porque sí. Se trata de que las autoridades hagan una pausa analítica y reflexionen que las niñas, niños y adolescentes en México deben ser atendidos de forma integral y se deben garantizar todos sus derechos. Sólo por eso deberían reconsiderar y detener la iniciativa de reforma en materia de simplificación orgánica. Este debate aún no concluye.
La Iniciativa con proyecto de decreto, en materia de Simplificación Orgánica, presentada por el Titular del Poder Ejecutivo Federal es un atentado contra los derechos de las niñas, niños y adolescentes del país. Es responsabilidad de las diputadas y los diputados federales de todos los grupos parlamentarios detener este retroceso. Aún tienen oportunidad para recapacitar.
